No es casualidad que se hayan producido en vísperas de vacaciones y tras la firma del pacto de empresa, no dejando ningun márgen para que los trabajadores y trabajadoras se organicen.

Coronavirus, cuestionamiento y oportunidad
Estamos asistiendo a una nueva etapa de la crisis/colapso del modelo social capitalista. La entrada en recesión, tras un breve periodo de crecimiento, venía siendo reiteradamente anunciada. Esa fase regresiva, digámosle “normal” dentro de los ciclos económicos, ha sido irrumpida por el coronavirus para ser llevada a unas dimensiones no previstas en anteriores pronósticos y difíciles de prever todavía en la situación actual.
De haberse producido sin el coronavirus, esa fase regresiva que calificaba de “normal” hubiera sido ya de por sí una alarmante anormalidad: crisis cada vez más profundas en ciclos cada vez más cortos, representables gráficamente no por una curva aceleradamente descendente, sino por una espiral o torbellino. Esa fase descendente en espiral de la “normalidad” viene a recordarnos que estamos asistiendo a un agotamiento de este “nuestro” modelo social. No lo olvidemos.