De «acuerdo histórico», «potente», «buena noticia», » que va a acelerar el «crecimiento económico», con estas eufóricas declaraciones se despachaban los jefes de CC.OO. y UGT, después de la firma del pacto social con el Gobierno y la patronal, para elevar el salario mínimo interprofesional hasta los 850 euros en el año 2020, un acuerdo supeditado a las siguientes condiciones: «Siempre que la economía registre cada año un crecimiento del PIB real superior al 2,5%, y un incremento de la afiliación media a la Seguridad Social superior a las 450.000 personas». Para 2017 la subida será de un 4% o de 29 euros.
Con tales declaraciones de Pepe Álvares y Unai Sordo, no hace falta que el gobierno y la patronal salgan a anunciarlo y bendecirlo. Si la economía va también , si somos la 4ª potencia de Europa: ¿porque no tenemos el SMI al mismo nivel de Francia (1480), Alemania ( 1.500), Bélgica (1.531), Holanda (1.551), Reino Unido (1.396), Irlanda (1.563), Luxemburgo (1.998) y estamos al mismo nivel que Portugal, Grecia y Eslovenia?. La respuesta no es otra que la riqueza en España se reparte de la forma más desigual de casi toda Europa.