Desde la Confederación General del Trabajo (CGT) no podemos dejar de celebrar la noticia, que se ha conocido hoy, de la absolución de los 8 trabajadores de Airbus, a los que se pedía varios años de prisión por su participación en un piquete en la Huelga General de 2010.
Pero la alegría por que se haya hecho justicia en el caso de estos trabajadores injustamente procesados, no puede hacernos olvidar que más de 200 personas han sido condenadas (con desorbitadas sanciones económicas o incluso varios años de cárcel) por actos muy similares a los que motivaron el procesamiento de 8 de Airbus. Decenas de sindicalistas y activistas sociales siguen todavía pendientes de juicio, con abultadas peticiones de condena por parte de fiscales y acusaciones particulares.
Por otro lado, no hay que dejar de recordar aquí y ahora casos como los de Alfon (ocho meses ya en prisión), el de los dos titiriteros de Granada (puestos en libertad, tras varios días encarcelados) a los que se les mantienen todos los cargos o los de los diversos jóvenes que han sido detenidos y mandados a prisión como resultado de rocambolescas operaciones policiales para desmontar inexistentes grupos armados de orientación anarquista o internacionalista (Pandora, Mateo Morral, Kurdistán, etc.).