Gestamp ha tenido «beneficios millonarios» durante años y ha denunciado que ahora, «con la completa complicidad» del Gobierno vasco «plantee el despido de 230 trabajadores».

Ni nos vendemos , ni nos rendimos
Gestamp ha anunciado el cierre de dos plantas en Bizkaia, GTS y Matricería de Deusto, y el despido de todas las plantillas. Los 230 trabajadores, en huelga indefinida, no entienden la decisión y el sindicato LAB critica que el Gobierno vasco no exige contraprestaciones de empleo a una empresa hipersubvencionada
Esta iniciativa, de conseguirse, tendría importantes beneficios, como favorecer la conciliación familiar y social, el ahorro de costes asociados a rutas, comedores, calefacción, luz, etc., la reducción del absentismo y la fatiga mental y física de las personas trabajadoras. Además, evitaría la destrucción de empleo y posibilitaría el mantenimiento de todo el personal cualificado. Por otro lado, CGT también cree que reduciría los desplazamientos de quienes trabajen en el sector, reduciendo a su vez el impacto ambiental relacionado con estos movimientos.
La semana pasada, arrancamos la semana con la noticia de que Gestamp había comunicado a los representantes sindicales de las plantas de Matricerias Deusto y GTS su cierre inminente . Entre las dos plantas, suman una plantilla de 230 trabajadores y trabajadoras. La comunicación de dichos cierres ( el proceso formal comenzará esta semana) se hizo en unas reuniones convocadas en principio para otras cuestiones, de ahí el asombro, estupor, y posterior desolación de los representantes de los trabajadores y trabajadoras , así como de las dos plantillas en general.
Matricerias Deusto eta egungo GTS Gestamp taldeko matrizeria arloan aintzinakotasun gehien duten enpresak dira. Azkenengo urteetan, matrizeriako atala, esponentzialki hazi da, sektoreko enpresak erostearen ondorioz, zein Gestamp taldeak berak sortu dituelako. Aipatutako Mat. Deusto eta GTStik aparte, Gestampeko matrizeria atalean GTH, GTE, ICT, ICTM, ADRAL, GTO,.. daude, zeinetan 800 langile inguruk lan egiten duten.
La reivindicación histórica de las 30 horas semanales es el camino a seguir. Aplicando las fórmulas oportunas, la reducción de la jornada tiene como consecuencia directa una drástica reducción del absentismo; conlleva igualmente una mejora de la rátio productiva. Esta combinación generaría, en términos generales, un 25% más de empleo sin poner en riesgo la viabilidad de las empresas, y una contribución directa al mantenimiento de los salarios. La generación de empleo que supone esta medida, tiene un beneficio directo en las arcas públicas mediante el ahorro en las aportaciones para el mantenimiento del empleo al mismo tiempo que se reducen las prestaciones por desempleo, entre otros beneficios.
Saint-Gobain Cristalería S.L. ha iniciado procedimiento para cerrar la División de Glass en la factoría de Arboç.
La empresa ha comunicado sus intenciones a los medios de comunicación, con el único objetivo de crear un escudo para lavar su imagen ante el cierre de una parte del centro de trabajo que afectará a 122 familias de trabajadores directos, sin tener en cuenta los indirectos que afectarían a muchas familias más. Y todo ello en un centro de trabajo donde los resultados de explotación son positivos.
Hasta ahora, la única posibilidad para adaptar la jornada de trabajo para conciliar la vida laboral y familiar era solicitar una reducción de jornada por cuidado de un hijo o familiar. Pero tras el Real Decreto 6/2019 existe otra posibilidad recogida en el artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores:
Las personas trabajadoras tienen derecho a solicitar las adaptaciones de la duración y distribución de la jornada de trabajo
Es lo que se desprende de las filtraciones llegadas de la cumbre, finalizada la madrugada del martes, que ha reunido desde el pasado viernes a los jefes de Gobierno y Estado de la Unión Europea, en la cual se ha negociado el fondo de recuperación contra la crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus. Las negociaciones hacen indicar que desde los países autodenominados “frugales” -Holanda, Austria, Dinamarca, Suecia y en menor medida Finlandia- han exigido que esta ayuda estuviera vinculada a nuevas reformas en el ámbito laboral y de las pensiones.