Desde hace unas semanas, bajo la presión de la Comisión Europea y del Fondo Monetario Internacional, el gobierno griego ataca a los trabajadores del país.
Usa el nivel de endeudamiento del país (12,7%) para intentar justificar una retroceso social… injustificable. De hecho, las tasas de países como Gran Bretaña, el Estado Español, Japón, Estados-Unidos están también por encima del 10%.
Los trabajadores de Grecia se niegan, con toda la razón, a pagar la crisis del sistema capitalista. Los empresarios y los accionistas se han cebado con dividendos, deducciones fiscales de todo tipo y sueldos astronómicos que les han permitido adquirir fortunas increíbles. Ellos deben pagar la crisis.