Si el problema es el sistema, no pidamos que el sistema resuelva nuestros problemas: ABSTENCIÓN.
Porque no es un sistema que garantiza los derechos fundamentales de las personas, al contrario, ante problemas económicos precariza y liquida estos derechos. Porque es un sistema corrupto, donde la clase política en el poder y sin control, aprovechan para montar redes clientelares para sostenerse.
Porque no es una democracia real, donde el pueblo tiene el derecho permanente a decidir en todas y cada una de las cuestiones principales que nos afectan. Porque las elecciones son un fraude, donde no elegimos nada. Porque votar es apuntalar un sistema donde las campañas electorales son un espectáculo donde se engaña sistemáticamente.
Porque los que gobiernan no mandan. Los que mandan no se presentan y son los grandes capitalistas y banqueros. Imponen sus leyes y controlan los aparatos estatales para hacerlas cumplir, a saber: los jueces, la policía y los militares.
Porque no estamos por la abstención pasiva. Por el pasotismo. Nuestra manera de entender la política, no pasa por delegar cada cuatro años nuestra responsabilidad social, y esperar inactivos a que los/as políticos/as profesionales resuelvan los problemas de la ciudadanía. Somos responsables de lo que pasa y votando, les damos carta blanca.
Porque la clase política y medios de comunicación-manipulación suelen decir que quien no vota, no tiene derecho a quejarse. Pensamos, al contrario, que quien delega en un profesional ya a renunciado a su derecho a decidir y contribuye a mantener el sistema. Ser responsables supone implicarse y comprometerse en la lucha social.