Hay algo que está muy claro y es que FUNESPAÑA ha conseguido unir a una plantilla muy desigual, tener todos un mismo sentimiento de miedo, incertidumbre y malestar, nos ha movilizado y juntos, somos más fuertes.
Confederación General del Trabajo – Lanaren Konfederakunde Nagusia
Esta es la situación que tenemos que sin duda dará lugar a no pocos conflictos, para hacer valer las pocas migajas con las que intentan silenciar las demandas de las trabajadoras de este sector. Es por ello que frente a la “paz social” de la patronal y los “sindicatos de pacto”, desde CGT hacemos un llamamiento a la clase trabajadora para organizarse y luchar
CGT-LKN entiende que desde la patronal se aprovechará cualquier división o debilidad para reducir los derechos laborales de todas las personas trabajadoras y aumentar los beneficios de sus empresas por lo que es evidente que la UNIDAD DE LA CLASE TRABAJADORA es la herramienta más potente que disponen sus representantes para poder dignificar las condiciones laborales. CGT-LKN siempre colaborará por el mantenimiento de dicha unidad en la búsqueda del apoyo mutuo y agradecerá que todas y todos trabajen en esa misma dirección.
Si bien estas estadísticas son positivas para la creación de empleo, lo cierto es que desde CGT vemos necesario ir más allá de los números, ya que nos preocupa que ante los cambios regulatorios aprobados con la Reforma Laboral, la precariedad esté teniendo un lavado de cara bajo las actuales formas de contratación “indefinida”.
La solución, ante este escenario, pasa por la implicación personal de cada uno de los trabajadores del sector, por abandonar la idea que estos sindicatos traidores nos venden que deleguemos en ellos la solución de nuestros problemas. El resultado de entregarnos a esta idea ya lo padecemos en nuestras condiciones, con las que se llenan los bolsillos.
La CLASE TRABAJADORA como principal sustento de la HACIENDA PÚBLICA
Ante una crisis como la actual, cuando nuestros servicios y bienes públicos se ven amenazados parece que los argumentos cuestionando el gasto público vuelven a resurgir, despertando así la posibilidad de nuevas políticas de recortes y austeridad.
Estamos excesivamente acostumbrados a escuchar términos socialmente lesivos: paro, pensiones, desahucios, listas de espera, horas extras, flexibilidad laboral, ampliación de jornada, saturación de aulas, asumiendo erróneamente que para salir de esta influencia devastadora generada por el ciclón “economicida”, hay que doblar la jornada laboral.
CGT ha indicado que el origen del conflicto está en una persecución y lucha contra el fraude llevada a cabo por parte del Gobierno y la Tesorería General de la Seguridad Social. Una normativa, la española, que criminaliza a todo un colectivo, contraria al derecho europeo y que ahora el TJUE ha puesto al descubierto.
Por eso, porque tanto en Ucrania, Palestina, Siria, Yemen, El Sáhara…, lo que verdaderamente se está perdiendo son vidas humanas y se está destrozando el futuro de miles de familias y de la clase trabajadora, desde la FESIM hacemos un llamamiento a llenar las calles con un rotundo NO A LAS GUERRAS, en ninguna parte del mundo, bajo ningún concepto.
Si hemos de luchar que sea frente a las agresiones diarias que sufrimos como clase trabajadora, por parte de una élite miserable y decadente, con el objetivo final de nuestra emancipación.
El antimilitarismo y la solidaridad fraternal entre las personas trabajadoras del mundo es hoy en día el único bando que defender y en el que alistarse.
NO A LA GUERRA, NO EN NUESTRO NOMBRE