Mujeres, muchas de ellas de origen extranjero, las que han ocupado esos huecos de manera formal y en muchos casos informal, como ya lo hicieron las autóctonas en otros tiempos. La falta de servicios sociales que atiendan determinadas situaciones como la dependencia, el cambio de las estructuras de los hogares, el aumento de familias reestructuradas, monoparentales, la ausencia de redes de apoyo familiares, la reducción en tamaño de las familias, la dispersión geográfica de las mismas, la falta de políticas de corresponsabilidad que permitan la conciliación de la vida laboral y personal, los modelos productivos, etc., hacen que el trabajo en el hogar, tanto las tareas domésticas como las de cuidado, tengan que ser cubiertos con personas que desempeñan un trabajo que merece tener los mismos derechos que el resto, dejan‐ do de ser una relación especial para ser una relación laboral común.

Acerca de lo que llaman «unidad» y su incompatibilidad con la independencia
En la actualidad, en plena pandemia Covid, el sindicato UGT se añade a la gigantesca campaña propagandística de seguros privados que hacen su agosto sobre el deterioro creciente de la sanidad pública. Al mismo tiempo, sin ningún rubor, convocan el próximo sábado, junto a CCOO y otros movimientos sociales y sanitarios situados en la órbita del PSOE y Podemos una manifestación «en defensa de la sanidad pública» y contra el gobierno del PP de Madrid.