La Cumbre del Clima de París (COP21) se cerró este sábado con un acuerdo. Los colectivos ecologistas mostraron su disconformidad con un texto que consideran insuficiente y con un lenguaje poco claro y deja a los combustibles fósiles en vías de eliminación, pero no concreta los compromisos necesarios para alcanzar el objetivo.
Greenpeace valoró «positivamente» la limitación de 1,5 grados, pero aseguró que las medidas contempladas en el Acuerdo de París «no conducen» a dicho objetivo. «Se ha trabajado mucho para que las partes acudiesen a la cita y las 196 delegaciones sí que han mostrado un interés para que saliese un acuerdo de la Cumbre. A pesar de ello, la portavoz de Greenpeace afirmó que el texto saliente «no es suficiente para los impactos que ya se están viendo»: «Nos falta un lenguaje que deje más claro cómo se van a lograr esos resultados que se proponen», explicó.
Es necesario que ahora los países «adopten políticas energéticas y climáticas que garanticen un modelo de energías renovables, a pesar de que el texto no les obliga». «Las renovables son reales, han abaratado costes y están listas para competir con las energías sucias», explicó. Sin embargo, lamentó que el Acuerdo de París por el Clima «no marque un abandono absoluto de los combustibles fósiles».