El objetivo no debería expresarse en términos de «construir una república desde abajo», sino en términos de «construir una sociedad radicalmente libre y autónoma».
Todo lo que se construya desde abajo es bueno….a no ser que se eleve sobre unos pedestales preparados desde arriba…
Cuando está a punto de empezar la campaña electoral y volvemos a contemplar el insufrible espectáculo de la competición entre partidos para cosechar el máximo numero de votos, quizás sea buen momento para hacer balance del intenso periodo de enfrentamiento entre el Gobierno y el Estado Español, por una parte, y el aspirante a ser un Estado Catalán, por otra. Un enfrentamiento en el que sectores revolucionarios, así como bastantes anarquistas y anarcosindicalistas, se involucraron al considerar que había que tomar partido, que era necesario estar allí donde estaba el pueblo, y que era preciso optar por luchar.