Los números se prestan a manipulación del mismo modo que las palabras. Nos pueden hacer creer una cosa cuando es todo lo contrario. En la presentación de los presupuestos de la CAV para 2014 el Gobierno Vaco ha resaltado que los dos principales objetivos de este presupuesto son la mejora del modelo vasco de protección social (lucha contra la exclusión, sanidad y educación) y que serán «las primeras en revisarse al alza».
Nos dicen que el departamento que más crece con respecto al gasto real de este año, un 19,7 %, es el de Empleo y Políticas Sociales, debido fundamentalmente a las dotaciones de la Renta de Garantía de Ingresos y de la Prestación Complementaria de Vivienda, fijadas en 384,5 millones de euros.
Si en el año 2012 el gasto por la RGI y de la prestación complementaria de vivienda alcanzó 414 millones. Con un aumento previsto para este año de 20.000 personas paradas más y de 4.000 para el próximo año, se va a gastar un 92% menos. Siendo la RGI un derecho, da que pensar que se van a producir cambios para restringir el acceso a la RGI y la PCV. La partida económica para Ayudas de Emergencia Social pasa de 17 a 20 millones a todas luces insuficiente por el aumento del paro esperado.