Gestamp casi cuadruplica su beneficio y supera los niveles previos al Covid

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ANA BARANDIARAN, El correo

El sector de la automoción, el principal de la industria vasca, está mostrando síntomas de fuerte recuperación tras el golpe de la pandemia. Cie Automotive publicó el miércoles unos resultados récord en el primer trimestre y ayer le tocó el turno a Gestamp, que también presentó una gran mejoría. Así, la multinacional especializada en estampación obtuvo un beneficio en el periodo de 51 millones de euros, lo que supone casi cuadruplicar los de 2020 e incluso superar los 41 millones de 2019. Es decir, que ha «sobrepasado los niveles prepandemia».

El grupo publicó resultados a la tarde, tras celebrar a la mañana su junta de accionistas en formato telemático, en la que no participó su presidente, Francisco Riberas, por estar en casa recuperándose del Covid. Le sustituyó su hermano Jon, vicepresidente,
que analizó el balance de 2020, cuando Gestamp registró las primeras pérdidas de toda
su historia, 71 millones de euros, si bien ya se constató una fuerte mejoría en el segundo semestre. En esa etapa aplicó un duro plan de choque, con el cierre de la Matricería Deusto y la ingeniería de troqueles GTS, dos filiales que sumaban 230 trabajadores.

Esta medida causó gran conmoción en Euskadi, donde el grupo de automoción tiene su sede. El ajuste fue pactado con el sindicato mayoritario, LAB, pero recurrido por ELA ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, que ya dictó sentencia para GTS. La sección presidida por Pablo Sesma –la misma que ha emitido el fallo sobre PCB–consideró injustificados los despidos, pero no los anuló. El grupo siempre ha argumentado que estos cierres eran la única forma de mantener vivas sus otras
plantas matriceras en la comunidad autónoma, que emplean a 570 personas.

Con estas medidas de control de costes y la recuperación del mercado a partir del segundo semestre, Gestamp ha logrado enderezar sus cuentas y amortiguar
el agujero causado por el Covid. En el primer trimestre del año el grupo ingresó 2.108 millones de euros, lo que supone un 4,8% más que en igual periodo de 2020, aunque si se descuenta el efecto del tipo de cambio el incremento es mucho mayor, del 11,7%. El resultado operativo –Ebitda– se situó en 258 millones de euros, un 33,7% más.

«Gestamp ha ofrecido un sólido primer trimestre de 2021, mejorando el primer trimestre de 2020 e incluso el de 2019 a todo los niveles, a pesar de los menores volúmenes», subrayó el presidente ejecutivo de Gestamp, Francisco Riberas, en una
nota. La dirección destacó especialmente que se hayan mejorado los márgenes sobre Ebitda hasta el 12,3%, «en línea con el objetivo de llegar al 13% en 2022». Para 2021 se espera una mejora de volúmenes, con un nivel similar al de 2019.

“Advierte de los problemas por la falta de ‘chips’, aunque confía en que
su incidencia baje.”

No obstante, Francisco Riberas también alertó de que «el riesgo macroeconómico permanece mientras la pandemia continúaafectando a geografías importantes y los esfuerzos de vacunación son heterogéneos». Asimismo, su hermano Jon, vicepresidente del consejo, explicó durante la junta el problema que está suponiendo para el sector la escasez de semiconductores. «Esperamos que la incidencia en el segundo semestre sea menor, aunque también se notará», dijo. Otro asunto que les preocupa son «las presiones inflacionistas sobre la materia prima».

Por contra, los responsables de Gestamp ven como una oportunidad para el grupo la transición hacia el vehículo eléctrico, dados los avances que han conseguido para reducir el peso y acoger las pesadas baterías. También destacaron su apuesta por
los procesos de fabricación digital.

La junta ratificó el nombramiento de Loreto Ordoñez y Chisato Eiki como consejeras, de
forma que se alcanza un 30% de mujeres en este órgano.

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