La palabra Decrecimiento nos suena mal, pero no es un término negativo, ni mucho menos. Lo que pasa es que el Capitalismo ha adoptado el crecimiento como «norma de conducta», pero sólo el capitalismo, no las sociedades anteriores, aunque también crecían, y el Capitalismo es un «modo de explotación», de los recursos y de la gente, muy nuevo en la historia de la humanidad. Hasta el capitalismo, el crecimiento no era un objetivo. Los que hoy llamamos «primitivos» (más del 90% de la historia de la humanidad) eran tan «primitivos» que sólo trabajaban 3 horas diarias, lo que necesitaban para satisfacer sus necesidades. La economía capitalista sólo sabe crecer ó morir, producir en exceso y consumir en exceso, sin ningún concepto de saciedad. Pero esto sólo la economía capitalista, no el bienestar social. De hecho, aquella es como el desbordamiento de las aguas de un río (está, como veremos, totalmente desbordada), lo que se necesita es que las aguas vuelvan al cauce, que decrezcan, no que crezcan aún más.