Mercedes prevé una caída histórica del 18% al reducir su producción en 30.000 furgonetas

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Lo que podía ser un año histórico en la principal industria de Euskadi, con cifras de producción de vehículos jamás conocidas, se va a ir al traste por la crisis del coronavirus. Seis semanas sin actividad en la planta de Mercedes Benz en Vitoria, descenso de pedidos y un arranque que no será a pleno rendimiento hasta mediados de mayo pueden abocar a la factoría automovilística, con 5.000 trabajadores, a una caída sin precedentes en su trayectoria, con un reducción en el número de vehículos del 18%.

Porque, según ha podido saber EL CORREO, las cifras que maneja la dirección de la multinacional apuntan a fabricar 129.700 unidades de los modelos Vito y Clase V, casi 30.000 menos de las previstas hace apenas mes y medio. Entonces, precisamente, el programa operativo iba camino de elevarse hasta cotas nunca conocidas Álava de lanzar 159.000 furgonetas en 2020 si se concretaba un pedido de Estados Unidos.

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Ese dato hubiera supuesto un récord en los 66 años de la historia de la planta, pero el virus procedente de China y sus impredecibles consecuencias harán que la producción en Mercedes vuelva a cifras de 2016 -aquel ejercicio se cerró con 135.400 unidades-, cuando la fabricación de las nuevos modelos Vito y Clase V era todavía incipiente.

En función de la demanda

La caída del 18% es la previsión actual, pero en la factoría asumen que será la demanda de los mercados la que marcará en cada momento la realidad de la producción. Esta actividad industrial se retomará, si no hay cambios, el próximo 27 de abril, la fecha con la que ya trabaja la dirección para contar con los suministros necesarios para el arranque así como con el protocolo de seguridad, salud e higiene en el que está trabajando con los sindicatos.

La vuelta, en principio, se hará a un único turno y esa cadencia se mantendría las dos primeras semanas, ocho días en total porque la primera tiene dos festivos (el martes 28 por San Prudencio y el viernes 1 de mayo). Mercedes incorporaría el segundo turno a partir del 11 de mayo y con entradas escalonadas para evitar aglomeraciones; mientras que el tercer turno llegaría en torno al 18 de mayo, siempre y cuando en el arranque no haya habido contratiempos.

Con el fin de establecer ese protocolo para el regreso a la actividad, responsables de la compañía y representantes sindicales han comenzado una serie de reuniones para intercambiar información. Las primeras sensaciones de la parte social apuntan a que existen «algunas discrepancias importantes», por ejemplo en las rotaciones de los trabajadores. El uso de pantallas faciales en determinados puestos «puede generar un agotamiento o un estrés», explican trabajadores consultados, que «aconsejaría el refuerzo de equipos para tener más relevos y momentos de descanso» así como para extremar la limpieza de las herramientas. La compañía «no lo contempla por ahora», explican portavoces del comité.

Con el buzo desde casa

En su propuesta remitida a Mercedes, reclama para la plantilla una formación sobres las normas de seguridad e higiene que se establecerán en la fábrica y sobre sobres los equipos de protección individual que se entregarán a los trabajadores. El comité propone también entradas y salidas escalonadas cada quince minutos para evitar aglomeraciones.

La colocación de pantallas térmicas en los accesos a la fábrica para medir la temperatura de los trabajadores es otra de las reclamaciones al tiempo que aconsejan entrar y salir con el buzo de Mercedes, por lo que los sindicatos piden más ropa de trabajo «para garantizar la correcta higiene y desinfección diaria».

Por último, en el protocolo que han elaborado para debatirlo con la empresa, solicitan para el personal mascarillas FFP2 -o máscaras de protección ocular si no se puede respetar la distancia de seguridad- y guantes de látex o nitrilo. Y sobre la posibilidad de disponer de test rápidos para los trabajadores, el comité de empresa cree que sería conveniente para las personas «que tengan sospechas de poder estar infectadas» por coronavirus. Eso sí, reconocen que para ello la compañía automovilística debería contar con la autorización de los servicios públicos y que esos test rápidos son «prioritarios» para el personal de Osakidetza, de residencias y de cuidados de dependientes.

Fuente: https://www.elcorreo.com/alava/araba/mercedes-preve-caida-20200417225958-nt.html

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