Porque:
– En el Estado Español a pesar de las actuales leyes, las mujeres seguimos sin tener derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y sobre nuestro futuro . Seguimos teniendo una Ley de plazos que ni nos garantiza el derecho a abortar libremente ni de forma gratuita en el sistema de Sanidad Público.
– Nos tememos que el actual panorama político ataque los tímidos derechos alcanzados con esta ley de plazos y el espíritu del exministro “Fachardón” vuelva al debate público sobre el derecho a abortar.
– Las menores de 18 años continúan sin tener derecho a interrumpir un embarazo no deseado. Exigimos que ni su familia ni sus tutorxs legales puedan decidir sobre su maternidad. ¡Aborto libre también para ellas!
– Además, más del 80% de los profesionales sanitarios de la Sanidad Pública se declaran objetores en la mayor parte de las Comunidades Autónomas, lo que provoca que se subcontraten a la sanidad privada más del 80% de los abortos cada año. Ginecóloga, ginecólogo, si no estás de acuerdo con las leyes que rigen tu profesión, ¡no ejerzas en la Sanidad Pública, no sigas obstaculizando nuestro derecho a abortar!
– El sistema capitalista necesita mano de obra y consumidorxs para perpetuarse, por eso se aferra a decidir por nosotras . ¡Por una maternidad libre y consciente!
– La Educación Pública sigue sin garantizar el derecho a la Educación Sexual , ni la promoción de una sexualidad libre no necesariamente hetero-normativa, la anticoncepción y la prevención de las infecciones de transmisión sexual. Denunciamos que la Educación Sexual de nuestras hijas e hijos siga estando en manos de la industria del porno mainstreaming.
– La ilegalización también condena a las y los profesionales de la salud que defienden el derecho a abortar libremente en condiciones de seguridad . ¡Fuera el aborto del código penal!
– En el resto del mundo, la situación no mejora. La ilegalización del aborto ocasiona que mueran muchas mujeres a causa de los abortos clandestinos o que sufran complicaciones después de éstos que las incapaciten de por vida.
– Es por ello que nos sumamos a la campaña internacional por el derecho a abortar en Argentina y en el resto de países donde esta cuestión no se pueda ni plantear.