Mujeres, muchas de ellas de origen extranjero, las que han ocupado esos huecos de manera formal y en muchos casos informal, como ya lo hicieron las autóctonas en otros tiempos. La falta de servicios sociales que atiendan determinadas situaciones como la dependencia, el cambio de las estructuras de los hogares, el aumento de familias reestructuradas, monoparentales, la ausencia de redes de apoyo familiares, la reducción en tamaño de las familias, la dispersión geográfica de las mismas, la falta de políticas de corresponsabilidad que permitan la conciliación de la vida laboral y personal, los modelos productivos, etc., hacen que el trabajo en el hogar, tanto las tareas domésticas como las de cuidado, tengan que ser cubiertos con personas que desempeñan un trabajo que merece tener los mismos derechos que el resto, dejan‐ do de ser una relación especial para ser una relación laboral común.

Jubilarse un año más tarde de lo que corresponde eleva la probabilidad de morir antes de los 70 años
Además de constatar que se eleva el riesgo de morir prematuramente, este think tank hace un cálculo del «coste o beneficio social» de poner trabas a la jubilación anticipada y constata que «el impacto adverso sobre la esperanza de vida supera las ganancias fiscales». Es decir, el ahorro que consigue la Seguridad Social no compensa la pérdida de vidas humanas derivada del retraso en la jubilación.