Entre el 8 de enero y el 25 de octubre, si se mantiene el calendario previsto, unas 150 personas pasarán por la Audiencia de Álava dentro del macrojuicio del ‘caso De Miguel’. Éste es el quién es quién del mayor caso de corrupción investigado en Euskadi hasta la fecha.
El “caso de Miguel” fue desvelado en diciembre de 2009 por una abogada que interpuso una denuncia por presunto intento de cobro de comisión por parte de personas ligada al PNV. Supuestamente, se habría intentado cobrar tras adjudicar a las empresas representadas por esta letrada un contrato de asesoramiento durante la ampliación del parque tecnológico de Miñano. El importe de la adjudicación superaba los 4440.000 euros. Durante la instrucción judicial la letrada presentó varias grabaciones que provocaron la imputación de su exsocio en la mercantil Urbanorma.
Tras la apertura de diligencias por la denuncia interpuesta por la abogada, la Ertzaintza detuvo a 8 personas, entre las que se encontraban el entoncese Diputado de Administración Local y Equilibrio Territorial en Araba Alfredo de Miguel y el exdirigente del PNV Aitor Tellería, responsable del semillero de empresas del parque. A lo largo de la investigación judicial fueron imputadas 9 personas. que relata hachos relacionados.
En mayo de 2010, el juzgado encargado del “caso De Miguel” recibió un anónimo que relata hachos relacionados con una fallida recalificación en Zambrana y la construcción de la nueva sede del PNV en Gasteiz. Por otra parte, las Juntas Generales crean en 2011 una comisión para investigar la “trama Zambrana”. El Gobierno Vasco hizo lo propio.
Algunos socios de la firma catalana que invirtió en la fallida operación urbanística de Zambrana denunciaron a su administrador por supuestos pagos a la red de empresas del “caso De Miguel”. Más de un millón de euros por trabajos que no consta que se llevaran a cabo. El intermediario entre el grupo inversor catalán y el Ayuntamiento de Zambrana, Iosu Arruti, para justificar la ausencia de facturas por los citados trabajos, alegó ante el juzgado que su oficina había sufrido una inundación.
A mediados de 2010, Urkullu, como presidente del EBB, instó en público a De Miguel y Tellería a entregar sus carnés de afiliado. Durante la rueda de prensa, el lehendakari manejó fases metafóricas como “puede que alguna hoja se pudra pero el árbol seguirá en pie, vivo y fuerte”.
Nota: Texto extraido del libro de Ahoztar Zelaieta: Jóvenes Burukides Bizkainos- Clientelismo y “fontanería” en el PNV
