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rca de un centenar de personas se han concentrado en la sede del Gobierno vasco, por la negativa de este a aplicar en los presupuestos el incremento del 8% del SMI a los Incentivos al Empleo, la Renta de Garantía de Ingresos, el Complemento de Prensiones o las ayudas al alquiler y por el mantenimiento durante los últimos 5 años del recorte en un 7% de las cuantías a percibir.
Por la decisión de incrementar la cuantía de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) en función del índice de precios y no del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) adoptada el pasado fin de semana por la Consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, de no aplicar -lo que por LEY es de obligado cumplimiento- el incremento del 8% del SMI a las prestaciones gestionadas por Lanbide.
Por la política del departamento de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno vasco que dice “impulsar nuevos programas y recursos económicos de activación laboral que permitan la inserción al mundo del trabajo de quienes perciben la RGI para evitar situaciones de cronificación y estimulando su incorporación al mercado laboral”, mientras se hace precisamente lo contrario: bonificar y subvencionar a empresas, que contratan en precario.














