CGT-LKN Metal Bizkaia apoya la convocatoria de Huelga en el Metal para el día 21 de junio.

La situación en la que se pueden encontrar miles y miles de compañer@s de pequeñas y medianas empresas a partir del 7 de julio fecha en la que se pierde la ultraactividad de los convenios provinciales es muy extrema.

Y aunque a corto plazo parece que en las empresas grandes con convenio en vigor no afecta está claro que cuanto peor sea el convenio provincial peor será la situación general del metal y más difícil será conseguir mejoras en nuestros futuros convenios.

Desde nuestra pequeña realidad como organización en el sector del metal en Bizkaia la apoyamos e intentaremos sumar, ya que entendemos que sólo sirve sumar.

Creemos que l@s trabajadorxs de empresas con convenios própios en vigor por supuesto que deben  luchar por el convenio provincial y no sólo eso, si no que deben “liderar” la lucha por la mayoría de trabajadores y trabajadoras que lo tienen más difícil para organizarse y luchar…

Teniendo en cuenta la situación y viendo la actitud de las patronales nos gustaría que ELA, la central sindical más grande del metal opte por una estrategia común, conciliadora y solidaria.

Existen debates entre la gente de si huelga sí, huelga no, falta de unidad entre los sindicatos, porqué por esto si y no cuando nos vacilan aquí en mi empresa, huelga de un día, huelga indefinida, convocar asamblea informativa en el curro…

Son importantes todas las reflexiones y no deben caer en saco roto, creemos que deben valer para construir las futuras luchas y no para dividir. Lo que tenemos claro es que todo cuanto se decida y se haga debe ser bajo la premisa de solidaridad hacia l@s más desfavorecid@s  y con unidad para que realmente sean efectivas.

El sector del Metal Alemán, en contra de lo que nos transmiten los sinvergüenzas políticos y  patronales, a través de la movilización y de la huelga ha conseguido un convenio digno para 3,7 millones de trabajadorxs.

 

Primero cogieron a los comunistas y yo no dije nada por que yo no era comunista.

Luego se llevaron a los judíos, y no dije nada por que yo no era judío.

Luego vinieron por los obreros, y no dije nada por que no era ni obrero ni sindicalista.

Luego se metieron con los católicos, y no dije nada por que yo era protestante.

Y cuando finalmente vinieron por mí, no quedaba nadie para protestar.

 

Bertolt Brecht

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