Al mismo tiempo consideran «triste» que el Comité de Empresa, sabiendo que existe esta persecución, no defiende a la clase trabajadora, y se convierte en cómplice de esta situación «porque sabe perfectamente lo que está ocurriendo y permite el acoso y la persecución sindical a otros compañeros». En este sentido argumenta que esto «no pasaría en CGT» y ellos defendería a cualquier compañero, «independientemente de su marca sindical».
