El acuerdo adoptado por el último Gobierno de Zapatero y firmado ahora por el ministro de defensa, Morenés, permitirá la asignación a la base de Rota de cuatro buques destructores estadounidenses como parte del escudo antimisiles del Pentágono.
Como resultado de la firma del protocolo de enmienda al convenio militar entre España y EE UU, aprobada por el último Gobierno de Zapatero y refrendada ahora por el Gobierno de Rajoy, la base militar que el ejército estadounidense ocupa en la localidad gaditana de Rota, acogerá en 2014 cuatro buques destructores en el marco del sistema antimisiles. Será el mayor incremento de fuerzas militares estadounidenses en suelo español en las últimas décadas.
Los cuatro buques destructores son de la clase Arleigh Burke, y están dotados con el sistema de combate Aegis, y una tripulación de 1.100 efectivos.
Durante el anuncio del despliegue del componente naval asignado al sistema antimisiles de la OTAN, fue el propio expresidente Zapatero quien prometió que el acuerdo derivaría en beneficios para la España en forma de puestos de trabajo, que rondarían el millar entre directos e indirectos.
Sin embargo, las promesas de los puestos de trabajo podrían quedarse en nada ya que incluso el personal civil con que cuenta la base (aproximadamente 1.100) están en el punto de mira de un recorte de gastos que el Pentágono planea desde hace tiempo.
Los prometidos puestos de trabajo no es lo único que la localidad gaditana pierde con el mantenimiento del estatus privilegiado de la base estadounidense, ya que recientemente una sentencia del Tribunal Supremo libera a la base de hacer frente al pago del Impuesto de Bienes Inmuebles por las viviendas y otros edificios de uso no militar que se encuentran en el interior de la base, alegando que están “afectos a la Defensa Nacional”. El Supremo priva así al pueblo roteño de un ingreso de más de 1,3 millones de euros anuales.
La sentencia del Supremo incluía la también exención del impuesto de circulación de los vehículos de la base, pero una decisión puramente política del Gobierno de Rajoy, al margen del poder judicial, permitirá al Ayuntamiento de Rota, en manos del PP, cobrar este impuesto por el que podría ingresar entorno a los 700.000 euros anuales.
El acuerdo, que fue adoptado durante el último Gobierno de Zapatero y contó con el visto bueno de Mariano Rajoy aún como líder de la oposición. La aportación de éste, ahora como jefe del ejecutivo español, es la de garantizar al Gobierno de los Estados Unidos la prórroga del acuerdo por ocho años más, hasta 2020, en contra de la fórmula utilizada hasta el momento, que era la renovación tácita anual,
En opinión de un mando de la base, puede que España no gane empleos, pero “ganará prestigio”, y según el capitán Scott C. Kraverath, máxima autoridad en la base: “Hay muchos factores implicados para poder facilitar una cifra exacta sobre el impacto económico que el despliegue de estos cuatro buques supondrá para la economía local”
La instalación y mantenimiento de esta base militar estadounidense de Rota fue fruto de los llamados Pactos de Madrid, firmados hace sesenta años por los Estados Unidos y el dictador.
