Hay 100 millones de inmigrantes del servicio doméstico en todo el mundo. De 700.000 trabajadoras domésticas que residen en España, solo 420.000 están dadas de alta en la Seguridad Social, a pesar de que es obligatorio desde 2012. Los salarios no se pagan, el abuso físico y sexual es común y queda impune, se exigen largas jornadas de trabajo, se ignoran las leyes del salario mínimo, el derecho a baja por enfermedad o a no trabajar los festivos.
En el año 2011, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), adoptó el Convenio 189 sobre los derechos de las empleadas domésticas, para valorar y reconocer el papel tan fundamental que juegan estas mujeres en nuestras sociedades y como un instrumento para controlar, evitar abusos y fomentar el cumplimiento de la ley, ya que establece una serie de normas que garantizan la protección de las trabajadoras.
Que el trabajo doméstico sigue siendo infravalorado e invisible, lo demuestra el hecho de que este convenio solo ha sido ratificado por 22 países, cinco de Europa, (Alemania, Bélgica, Irlanda, Italia y Portugal).Trabajo que es realizado principalmente por mujeres y niñas, muchas de las cuales son migrantes o forman parte de comunidades desfavorecidas, y son particularmente vulnerables a la discriminación con respecto a las condiciones de empleo y de trabajo, así como a otros abusos de los derechos humanos.
En el año 2012 entró en vigor la ley que integraba a las empleadas domésticas en el régimen general de la Seguridad Social y menos de un año después, el Gobierno abrió la puerta a que esta responsabilidad recayera de nuevo en las trabajadoras que cotizan menos de 60 horas mensuales.
Estar contratada bajo el régimen especial de empleadas de hogar implica discriminaciones respecto al resto de personas asalariadas, ya que están excluidas del derecho a prestación por desempleo y del fondo de garantía salarial. No existen tablas salariales que regulen la remuneración de acuerdo con las funciones desarrolladas en el lugar del trabajo y no se da el derecho a la entrada en los domicilios de la inspección de trabajo.
