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Tras varios años con las pensiones congeladas o con la mísera subida del 0,25% a raíz de la Reforma de La Seguridad Social de Rajoy de 2012, fue tal el cabreo y hartazgo de la gran mayoría del mundo pensionista, que de un modo un tanto espontaneo y sin coordinación, decenas de millares de hombres y mujeres pensionistas salieron a las calles el 15 de enero del año 2018 en Hego Euskal Herria y en otros pueblos del resto del Estado.
Era difícil pensar o prever que aquel inicio del movimiento de pensionistas pudiera prolongarse y consolidarse como se ha hecho, de un modo especial en Hego Euskal Herria. Son ya tres años, en que siguen concentrándose todos los lunes, sin práctica interrupción en las cuatro capitales y en unos 70 pueblos de toda la geografía vasca, o vasco-navarra. Además se han llevado a cabo múltiples manifestaciones de pueblos, comarcales y provinciales.
Cuando llegó la pandemia del covid-19, a inicios del año pasado, tomaron aún más conciencia de la enorme importancia de la sanidad y de los cuidados, en especial para las personas mayores y dependientes en las residencias y otros centros sociosanitarios. Por ello, a todo lo largo del año pasado, tanto autónomamente, como en diversas ocasiones conjuntamente, compartieron, se apoyaron y se movilizaron unitariamente, asociaciones de familiares de usuarios de residencias, sindicatos del sector y el movimiento de pensionistas.
Gracias a estas movilizaciones y protestas se consiguió que desde el año 2018 nuestras pensiones no se deterioraran más y que la exigencia, junto a otros colectivos, de medidas de carácter público, sanitarias y sociosanitarias, haya cobrado una dimensión y demanda social de importante magnitud.
Pero los nubarrones a los que se enfrentan de nuevo, con la excusa o coartada de las élites económicas y políticas de los problemas generados por la covid-19 para imponer medidas y recortes en pensiones y otros derechos, hacen que no se puede bajar la guardia, ni dejar de lado sus protestas y movilizaciones, al contrario, piensan en multiplicarlas buscando que sean unitarias y plurales, condición importante para que sean masivas.
Están convencidos de que el movimiento de pensionistas vasco va a continuar haciéndolo, tratando también de facilitar encuentros de unidad de acción para la movilización con las plataformas de pensionistas del resto de los pueblos del Estado.
Esta es la mejor enseñanza, recuerdo, conmemoración y conclusión de la pelea que iniciaron el 15 de enero de 2018 y que van a continuar hasta lograr todas nuestras demandas.