El 8 de marzo de 2017, millones de mujeres de muchas partes del mundo fuimos a una huelga histórica por ser la primera huelga de mujeres global que iba más allá de una huelga laboral, incluyendo ámbitos como huelga de cuidados, de consumo y estudiantil.
Es justo reconocer que el movimiento feminista transfronterizo y transcultural ha conseguido que estas luchas estén en las agendas públicas. CGT se ha implicado con este movimiento participando activamente, no sólo convocando las huelgas de los 8M, sino en las diferentes movilizaciones y acciones conjuntas.
Este 8M de 2020, la CGT bajo los principios antipatriarcales, anticapitalistas, antirracistas e internacionalistas de nuestra organización, volvemos a salir a las calles en coordinación con el movimiento feminista para seguir luchando.
- Luchandojuntas contra las desigualdades, contra las violencias machistas
- Luchandopor el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos sin discriminaciones por razón de sexo, identidades y orientaciones sexuales
- Luchandopara ser mujeres libres, porque seguimos sufriendo la violencia patriarcal
- Luchando porque la mayoría de las personas en precario somos mujeres, porque las diferencias salariales también se reflejan en las pensionistas
- Luchandoporque el trabajo doméstico y de cuidados se invisibiliza y no se reconoce
- Luchandoporque las lesbianas, gays, bisexuales, trans, intersexuales, queer… seguimos discriminadas
- Luchando porque las mujeres migrantesy/o racializadas estamos en una situación de mayor vulnerabilidad ante la violencia de género, la violencia institucional y la violencia racista
- Luchando porque las mujeres rurales nos encontramos en un espacio patriarcal que nos discrimina
- Luchandoporque los recortes en educación, sanidad, servicios sociales y dependencia se hacen a costa del trabajo y el tiempo de nosotras
Por eso, sigamos luchando contra el consumo capitalista globalizado, sigamos luchando por una educación pública, laica, no sexista y sin estereotipos de género, sigamos luchando por una economía sostenible, justa y solidaria que gestione los recursos básicos y naturales de forma pública, colectiva, comunitaria.
Por un cambio real en las condiciones sociales y laborales de las mujeres, libres de violencias, y por una vida digna.
¡LUCHANDO CAMBIAMOS EL MUNDO!
¡SIN FEMINISMO DE CLASE NO HAY REVOLUCIÓN!