La manifestación ha sido convocada por los sindicatos ELA, SATSE, LAB, CCOO, UGT y ESK, que han anunciado que «vamos a seguir movilizándonos hasta que el Gobierno Vasco cambie sus políticas en materia de salud».
El pasado 8 de junio, la Consejera de Salud realizaba unas declaraciones de extrema gravedad en las que dejaba claros los planes del Gobierno Vasco para Osakidetza, que no son otros que la voluntad inequívoca de desmantelar la Atención Primaria y de precarizar el resto de niveles asistenciales. Y todo ello en el camino de la privatización, del ataque a los servicios públicos y del negocio de los seguros sanitarios privados.
Ante la gravedad de esas manifestaciones y de la grave situación que se vive en Osakidetza, especialmente en la Atención Primaria, los sindicatos ELA, SATSE, LAB, CCOO, UGT y ESK convocaron una manifestación para este 26 de junio, en Bilbao. La respuesta ha sido multitudinaria, miles de personas se han congregado a las 12 de la mañana en el Sagrado Corazón y han realizado el recorrido hasta el Ayuntamiento, donde las representantes de SATSE y ELA han leído un comunicado conjunto.
A pesar de que el Gobierno Vasco, en los últimos días, ha intentado hacernos creer que, en realidad, habíamos entendido mal y que la Consejera había dicho otra cosa, sus palabras fueron claras y no dan lugar a ningún tipo de confusión. La Consejera puso voz a lo que llevamos años denunciando, y explicó con absoluta nitidez que se van a cerrar consultorios; que algunos estarán atendidos, en exclusiva, por personal de enfermería; que se va a seguir ahondando en la especialización de los hospitales o, lo que es lo mismo, se van a cerrar servicios que hoy existen, para pasar a ofrecerlos en un único hospital en toda la CAPV; y que la ciudadanía se va a tener que desplazar más y más a menudo.
Y todo ello, amparándose en una eventual falta de profesionales, que es producto de sus decisiones políticas y que, además, intenta predicar incluso respecto de categorías en las que esa escasez es inexistente.
Lo que falta es voluntad para reforzar e invertir en sanidad pública. El problema no es la falta de profesionales, el problema son las precarias condiciones laborales, las cargas de trabajo inasumibles, la falta de estabilidad, la temporalidad sistemática.
Por desgracia, muchas de las cuestiones planteadas por la Consejera, que posteriormente ha intentado matizar, no son nuevas, llevan años en marcha. Ejemplos claros son los cierres en períodos vacacionales, la restricción de horarios o el recorte y centralización de servicios. Tenemos numerosos ejemplos de ello, porque incluso en pandemia, Osakidetza ha aplicado recortes: restricción horaria en los PAC de Deusto o Zumarraga; cierre del PAC de San Martín, en Gasteiz; cierre de las urgencias del Hospital Santiago, de Vitoria- Gasteiz, o el cierre de la cirugía cardiaca en el Hospital Basurto.
Este verano, una vez más, Osakidetza va a cerrar centros de salud; va a restringir el horario de otros; no va a sustituir las vacaciones de muchos profesionales; va a sobrecargar, todavía más, a los trabajadores y trabajadoras que presten servicios en ese período; y va a precarizar la atención que se ofrece a la ciudadanía.
Esta es la receta que se aplica años tras año. No hay más plan que precarizar, sobrecargar y recortar. Escuchamos a la Consejera día sí y día también poner la excusa perfecta de la falta de profesionales, pero todavía no le hemos escuchado decir qué plan existen para abordar esta situación. O sí, porque el plan lo dejó claro en sus manifestaciones: recortar y desmantelar.
En este escenario, la movilización es más necesaria que nunca. No podemos consentir que nos arrebaten lo que es nuestro: la sanidad pública, universal y de calidad. Vamos a seguir movilizándonos hasta que el Gobierno Vasco cambie sus políticas en materia de salud.