Hace unos días, ADIF ha comunicado la extinción de su contrato a nuestro compañero Rubén, con residencia en la Dirección de Patrimonio de Bilbao.
Hace cuatro meses que Rubén aprobó la OEP y se incorporó a la empresa. Al poco tiempo, Rubén solicitó medidas de conciliación para cuidar a sus hijos de corta edad. Desde entonces, según ha denunciado Rubén, con la iniciación del protocolo, venía sufriendo acoso laboral en su puesto de trabajo.
Quien haya conocido de cerca algún caso de acoso laboral sabe lo duro que resulta y el daño que provoca en la persona que lo sufre. Resulta más duro aún si acabas de llegar a una empresa, que no conoces bien los procedimientos internos y estás en periodo de prueba con la amenaza de despido sobre tu cabeza. Y lo más asombroso es que en vez de iniciar el protocolo de acoso, la Empresa responde con el despido fulminante de Rubén.
No podemos permitir que ADIF despida a un compañero por el terrible delito de haber caído en el departamento incorrecto o con el jefe o gerente equivocado.
No podemos permitir que ADIF despida a un compañero por solicitar medidas de conciliación o por denunciar acoso laboral. Si dejamos pasar este abuso, el día menos pensado, cualquiera de nosotros o nosotras puede recibir la carta de despido.
Desde CGT vamos a denunciar este atropello con todos los medios a nuestro alcance y vamos a iniciar las movilizaciones que sean necesarias hasta que la dirección de ADIF anule un despido que nunca debió producirse y cumpla sus propios protocolos tomando las medidas necesarias para acabar con el acoso laboral en la gerencia de Patrimonio de Bilbao o en cualquier otra área de ADIF/ADIF AV.