La Troika es sinónimo de austeridad, ajustes y recortes o lo que es lo mismo penuria, hambre y paro. La Troika es el Fondo Monetario Internacional, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo. Un mecanismo de control y supeditación de los pueblos.
La Troika controlada por las multinacionales imponen a los diferentes gobiernos y los partidos que los controlan (PP, PSOE, PNV, CIU, etc.) sus políticas que no son otras que las de los ricos contra los pobres, los de arriba contra los de abajo.
La Troika es un régimen político nuevo, no declarado de carácter internacional, que no ha sido elegido por nadie, que no gobierna pero ostenta la verdadera gestión del planeta.
El pago de la deuda que nos imponen, que, por cierto, no es nuestra, es la excusa perfecta para aplicar un plan largamente planificado. De este modo, a la estafa se la llama crisis y al robo deuda.
Un instrumento infalible de transferencia de recursos, o para ser más precisos de expolio, del Sur al Norte, ya sea a escala global o europea. Y un argumento para reducir los derechos de la mayoría y generar más beneficios al capital, recortando servicios públicos y privatizándolos de forma encubierta.
A marchas forzadas, hemos aprendido el significado de la Troika, pero, también, el de otros conceptos como indignación, rebeldía y desobediencia.