Hoy a las puertas de la sede del Gobierno Vasco en Bilbao, se ha desarrollado una concentración para exigir del Parlamento Vasco el reconcomiendo del valor social del trabajo doméstico y de cuidados.
Las ayudas a la conciliación excluyen a las trabajadoras de hogar desde hace 10 años. El 2 de febrero de 2017, el Parlamento Vasco dio al Gobierno un plazo de 9 meses para hacer un estudio sobre las condiciones de trabajo en el empleo doméstico de la CAV y sobre las necesidades que está cubriendo.
El 11 de mayo, el Parlamento acordó introducir en ese estudio la viabilidad de terminar con la exclusión de las trabajadoras de hogar de las ayudas a la conciliación que da el Departamento de Empleo a todo el resto de la gente trabajadora.
Pasado el plazo, no han hecho nada porque no tienen ninguna prisa en reconocer que hay una enorme cantidad de tareas de cuidado que se están resolviendo de manera precaria y a costa de la discriminación de las trabajadoras de hogar.