Tras este rechazo se pone en marcha el proceso en las Cortes para que España ratifique el CETA. La Mesa del Congreso, con el apoyo de PP, PNV, PSOE y Ciudadanos, rechazó primero siquiera cursar la iniciativa de Unidos Podemos, incluso contra el criterio de los letrados de la Cámara. La presidenta del Congreso, Ana Pastor, rectificó su propia decisión y permitió que la propuesta se calificara.
La fórmula utilizada por Unidos Podemos de enmienda a la totalidad, se ha debatido y rechazado el Pleno esta mañana y ha recabado 81 votos a favor, 262 en contra y una abstención.
Por otro lado Unidos Podemos ha presentado una moción para que se elevara al Constitucional el articulado referido a los arbitrajes entre empresas y estados cuando haya una discrepancia. Algo que, según ha denunciado el hoy portavoz de Unidos Podemos, Pablo Bustinduy, deja fuera a los tribunales de justicia ordinarios. El recurso previo ha cosechado 86 votos a favor y 258 en contra.
El rechazo de ambas iniciativas activa la tramitación parlamentaria. El CETA, si no surge ningún obstáculo por el camino, irá ahora a la Comisión de Exteriores del Congreso, luego volverá al Pleno, viajará al Senado y, después, será ratificado por el Gobierno. Entrará en vigor plenamente cuando lo firmen todos los países de la UE.