Tras la aprobación en el Congreso del RDL 2/2023 de 16 de marzo que cierra la segunda parte de la reforma de pensiones tenemos que decir que esta no es la reforma que venimos reclamando en las calles desde hace más de cinco años.
Aunque el RDL incorpora ciertas mejoras, es parte de un proceso de reformas que está recortando pensiones y derechos de las personas pensionistas. Reformas que como la del 2011 deberían haber sido derogadas y que en este RDL se perpetúan.
El incremento de las pensiones mínimas no alcanza ni siquiera los 1080 euros. Nos referimos a una persona pensionista mayor de 65 años, con cónyuge no a cargo, que según la tabla del gobierno pasaría de 743 euros en 2023 a 873 euros en 2027 tras aplicar en dicho año 2027 el 60% de la renta mediana tal como dictamina el RDL.
Rechazamos que se aumente de 25 a 29 años el periodo de años cotizados para el cálculo de la pensión. Ni 25, ni 29, ni 30, volver a los 15 años anteriores a 2011.
Mejorar la compensación de los vacíos de cotización es necesario, aunque el RDL ni siquiera vuelve a la situación anterior al 2011 y crear el complemento de brecha de género que aumenta para el año 2024 y 2025 un 10% la prestación por hijos/as, ambas medidas son insuficientes.
Aunque es positivo incrementar el fondo de la SS aplicando medidas como el destope de bases máximas de cotización, el establecimiento de la cuota de solidaridad o la mejora de cotizaciones, estas medidas por su cuantía y proyección temporal son escasas.
No se puede decir que este RDL no tiene recortes. Los recortes en las pensiones procedentes de reformas anteriores como el aumento de la edad de jubilación de 65 a 67 años o el incremento de años cotizados para acceder al 100% de la pensión se siguen cumpliendo y se ratifican recortes como el incremento de los años de cotización necesarios para el cálculo de la pensión de 15 a 25 años, que con este RDL se aumentan a 29.
Someter, tal como aparece en el RDL las decisiones futuras respecto a la financiación y prestaciones del SPP a los criterios del Informe de envejecimiento publicado por la Comisión Europea, la AiReF y el Pacto de Toledo deja la puerta abierta a nuevos recortes de las pensiones.
Instamos al gobierno y partidos políticos a aprovechar la tramitación parlamentaria para establecer de inmediato, en 2023 la pensión mínima de la persona pensionista con cónyuge no a cargo en 1080 euros por catorce pagas.
Derogar los recortes de las reformas de pensiones incluida la de 2011 (Recuperar cuando menos la jubilación a los 65 años, 15 años para el periodo de cálculo de la pensión y derogar los coeficientes reductores de la jubilación anticipada con 40 años cotizados). Que los planes de pensiones colectivos de empleo coticen y tributen como rentas de trabajo.
Restablecer la paga compensatoria para recuperar la pérdida del poder adquisitivo de las pensiones, medidas efectivas para erradicar la brecha de género en salarios y pensiones.
El EHPM-MPEH hemos convocado movilizaciones para el sábado 13 de mayo en todas las capitales y el jueves 25 de Mayo una movilización conjunta en Gasteiz.
GOBIERNE QUIEN GOBIERNE LAS PENSIONES PÚBLICAS SE DEFIENDEN
EUSKAL HERRIKO PENTSIODUNEN MUGIMENDUA
MOVIMIENTO PENSIONISTA DE EUSKAL HERRIA
2020mpeh@gmail.com
……..Nuestro compromiso, el de toda la CGT y la de Euskal Herria en concreto, está con el movimiento de pensionistas como así lo hemos manifestado en todas las ocasiones, nos volveran a ver en las calles, detras de su pancarta, la del Movimiento de pensionistas.
Salud y compromiso.