CGT-LKN ha realizado esta mañana sendas caceroladas frente a las sedes de BBVA y de CaixaBank reivindicando el reparto del trabajo frente a los despidos que se están dando en un sector que está utilizando la tecnología en la atención bancaria como excusa para cerrar sucursales y despedir trabadoras.
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Esta cacerolada coinciden con día en que está convocada huelga en CaixaBank con la amenaza del despido de cerca de 8.000 personas, y como consecuencia también podrían llegar a cerrarse 2.200 oficinas bancarias.
Se trata de un ERE histórico y son varios los motivos. El primero son las cifras, el banco ahora fusionado reúne a 44.000 trabajadores en España, superando a cualquier plantilla del sector bancario pues el Banco Santander cuenta con 25.470 empleados, BBVA con 28.777 empleados (con el ERE saldrán 2.900) y Banc Sabadell con 14.536.
Es la primera vez en los 117 años de historia del banco que los trabajadores deciden movilizarse, hacer paros parciales o ir a huelga. Los sindicatos convocantes entre los cuales se encuentra CGT cifran en torno al 90% el seguimiento de la huelga en CaixaBank y el cierre del 70% de las oficinas.
El banco catalán anuncio 8.300 despidos el pasado 20 de abril y dos meses después, la cifra se ha reducido a 7.400 y en la reunión de hoy ha reducido el numero de afectados en 450 empleados, con lo que la cifra se queda en estos momentos en 6.950 despidos.
La próxima y última reunión del ERE, será el próximo 29 de Junio y en caso de no producirse un acuerdo, con la representación sindical, en virtud de la Reforma Laboral de 2012, la empresa podrá acometer las medidas que considere oportunas, de acuerdo con el Art. 51 del Estatuto de los Trabajadores, que confiere el poder a la empresa para despedir a su antojo, a pesar de tener enormes beneficios, así los bancos españoles han obtenido un beneficio de 3.170 millones en el primer trimestre de 2021.