Estimados compañer@s,
Somos muchos los compañeros de RTVE que lo somos por convicción y por vocación. A algunos nos ha costado mucho esfuerzo y sacrificio poder trabajar en esta empresa, y lo hemos hecho porque queríamos trabajar en una empresa de comunicación que ha sido un referente mundial en calidad y saber hacer, y que creó escuela. Aunque se habla mucho de la BBC, lo cierto es que RTVE ha sido hasta hace bien poco la referencia fundamental en cuanto a profesionalidad en el ámbito de la radiotelevisión mundial.
Y decimos “ha sido” porque los gobiernos de turno ya se han encargado de que todo esto desaparezca. Esos políticos que se llenan la boca hablando de la “Marca España” mientras nos ahogan económica y profesionalmente, todavía no se han enterado que la Marca España era RTVE mucho antes de que ellos inventaran este concepto.
Y en este desmantelamiento de la radiotelevisión pública les ayudan algunos sindicatos presentes en nuestra empresa, inmersos en continuas luchas por ínfimas parcelas de poder y clientelismos inconfesables. Unos nos colaron el nefasto I Convenio de CRTVE apelando al miedo a “los que iban a venir” y en el que ya perdimos muchos derechos conseguidos durante años de trabajo, y otros nos impusieron el II Convenio, con el que siguieron claudicando, tras perder un referéndum VINCULANTE y haciéndonos patente que la democracia solo es válida cuando ganan algunos.
Debido a ello un grupo de trabajadores de RTVE en Bilbao hemos constituido la Sección Sindical de CGT en un intento de aportar un aire diferente a las relaciones con nuestra empresa. Todos l@s miembros de CGT –RTVE hemos militado en otros sindicatos y hemos visto qué es lo que no hay que hacer. Y lo primero es no traicionar a tus propios compañeros.
En CGT trabajamos todos. No tenemos liberados, porque quien no trabaja junto a sus compañeros pierde la perspectiva de lo que supone el esfuerzo diario de sacar adelante una empresa como esta frente a todos los intentos de desmantelamiento que soportamos. Tan solo se admite la liberación temporal para casos puntuales como la negociación del convenio, y solamente por el tiempo imprescindible para hacerlo.
En CGT no hay jerarquías. Los cargos solo lo son a título informativo y por una necesidad legal, pero todos los miembros del sindicato contamos lo mismo y lo decidimos todo entre todos. Aquí no hay ejecutivas que decidan por ti algo que no estuvieras dispuesto a decidir por ti mismo. Por eso todos los cargos y delegad@s de CGT firmamos una carta de dimisión sin fecha y la ponemos a disposición del sindicato.
En CGT luchamos contra el miedo que parece haberse hecho dueño de la voluntad de los sindicatos institucionalizados y al que parecen haberse rendido.