Esta misma mañana he podido leer uno de los casos de expediente en la empresa Unigel de Abrera donde plantean como causa para reducir el sueldo y los derechos de la plantilla, la situación drástica del mercado.
Los datos de producción de vehículos hablan de todo lo contrario. Mucho me temo que lo ya analizado se cumpla: la restructuración de empleo y la destrucción del mismo se mantendrá pero fruto de las ultra-flexibilidades firmadas por los sindicatos institucionales producirán más coches con menos plantilla y menos coste de la misma. Los beneficios serán para ellos y para nosotros la precariedad y la miseria.
Nos están convirtiendo en «socios» para las pérdidas y en trabajadores-esclavos para los beneficios.
Pero la CGT seguimos resistiendo y planteando alternativas a la sumisión de «los otros»