Cómo es posible que en servicios a la ciudadanía tan esenciales como la sanidad y la educación se den tantos casos de presencia de empresas privadas gestionando importantes tareas de hospitales y centros de enseñanza públicos, habremos de concluir que a lo largo de los últimos cuarenta años se han tenido que ir modificando las normas legales que antes impedían la presencia de subcontratas en el ámbito de la administración pública y la limitaban enormemente en el sector privado.

El Tribunal Europeo de Cuentas ha hecho público un informe sobre ocho «infraestructuras emblemáticas de transporte» ( I E T ), entre ellas la «Y vasca y su conexión con Francia: Enlace ferroviario de alta velocidad que conecta Vitoria (España) con Burdeos (Francia) (en el corredor atlántico)», en el que recoge en 100 páginas todo un catálogo de deficiencias, que incluyen sobrecostes de hasta el 54,7% con respecto a la previsión inicial, retrasos con repercusión en la seguridad y la reducción de la emisión de carbono, «previsiones de tráfico demasiado optimistas», «análisis de coste y beneficio mal hecho», falta de participación y no realización de «un análisis crítico de la sostenibilidad a largo plazo».