Banatu Taldea: Registro de la jornada, horas extra y reparto del empleo

Extraído de: https://banatutaldea.blogspot.com/2019/05/registro-de-la-jornada-horas-extra-y.html

A partir del 12 de mayo todas las empresas deberán llevar un registro
diario de la jornada de su plantilla. El objetivo de esta medida es
hacer aflorar los millones de horas extra impagadas que se dan de forma
crónica en nuestro mercado laboral.

En el primer trimestre de
2019, según el INE (Instituto Nacional de Estadística), a nivel estatal
se han realizado más de 5 millones y medio de horas extra semanales, de
las cuales el 46,4% han sido impagadas. Se trata de un fenómeno de gran
magnitud que esconde, no sólo un fraude a la Seguridad Social sino una
significativa destrucción de empleo. En este último caso no podemos
considerar únicamente las horas extra impagadas pues las retribuidas
perjudican igualmente al empleo. Estas horas forzadas son sin duda
también una nueva vuelta de tuerca en la precariedad laboral

En Navarra, desde Banatu Taldea, ya denunciamos esta situación hace un
año otorgando el Punto Negro del Paro a la patronal -CEN- por destruir
el empleo equivalente a la extensión de jornada ordinaria de una parte
de los trabajadores y las trabajadoras, en perjuicio de quienes no
logran acceder a un puesto de trabajo o deben trabajar a tiempo parcial.
Según nuestros cálculos, eran unos 1.800 empleos los que las horas
extra devoraban en Navarra en ese momento.

Pues bien,
recientemente, desde el Gabinete Económico de CCOO, a partir de datos de
la EPA, ha hecho público un cálculo del efecto en el empleo de las
horas extra en Navarra, el cual concluye que, por una parte, serían 633
los empleos que equivaldrían al volumen de horas impagadas y 1.183 a las
pagadas, un total de 1.816 empleos a jornada completa volatilizados por
esta práctica insolidaria.

Una vez puestos los datos encima de
la mesa, una vez conocida la próxima obligatoriedad del Registro de la
Jornada, no podemos conformarnos con que afloren las horas impagadas y
se regularicen. Debemos evidenciar lo absurda e inaceptable que resulta
la paradoja que se da entre el Paro y las horas extra. Ambas realidades
no son sino la cara de una misma moneda, la moneda de la precariedad en
la que hay quien soporta largas jornadas laborales y carece de tiempo
para la vida, mientras hay quien no tiene opción de trabajar y debe ver
su vida condicionada por el Paro o por trabajos a tiempo parcial.

Por ello, sería conveniente ir reduciendo la tolerancia social a esta
forma de “anti-reparto del trabajo” que suponen las horas
extraordinarias para que seamos capaces de frenar al empresariado cuando
las ofrece/impone y también a las personas que las aceptan, siendo
conscientes de que se dan casos, sobre todo entre personas con
contratación eventual, en los que las presiones ejercidas conllevan la
práctica obligatoriedad de las mismas.

Queremos trabajar menos
para trabajar todos y todas, para, así, vivir mejor. Un buen y muy
lógico primer paso sería transformar las horas extraordinarias en empleo
para acercarnos a otro modelo social más digno, solidario y justo.

Sin entrar en el debate sobre las condiciones y las dudas sobre la
efectividad en la puesta en práctica del Registro diario obligatorio de
Jornada, proponemos que, con la información que se obtenga, los
Sindicatos, Comités de Empresa, los y las trabajadoras planteen en la
negociación de los convenios, convertir el tiempo resultante de las
horas extra en nuevos puestos de trabajo. La Administración Foral debe
tener un papel ejemplarizante en este tema.

Pamplona/Iruñea, 9 de mayo de 2019

Banatu Taldea / Iniciativa decrecentista por el reparto de los trabajos.