BARRA LIBRE
A partir de la firma del “súper acuerdo” que nos endosaron el día 10 en Lasarte, la empresa tiene barra libre para incluirnos dentro de cualquier calendario de los 76 posibles, pero no solamente este año, sino durante toda nuestra vida laboral entre estas vallas.
En la reunión de ayer día 18 de abril el sindicato CCOO-UGT-CSIF aprobó todos los calendarios, incluso un calendario que históricamente rechazaban, el calendario de sala de máquinas.
El colmo es que recoge una referencia de apertura de 358 días, cuatro días más de lo que marca el limite del reciente acuerdo (278-354 días), todo les vale.
Dentro del orden del día de la reunión del Comité, a petición de CGT, se trataron los siguientes puntos:
1º.- La asamblea general de trabajadores: En este punto todas las secciones sindicales reconocieron que el día dos de abril el presidente del Comité les entregó copia de las firmas de los trabajadores demandando la misma, a lo que hicieron caso omiso. Es evidente que su hoja de ruta la elabora la empresa y no contemplaba ese trámite. Tenían muy claro que iban a firmar el acuerdo el día 10 de abril y no lo iban a posponer porque 500 trabajadores de nada en Valladolid y más de 1000 en Vitoria les exigieran asambleas generales. Queda claro que no quieren verse las caras con los trabajadores, les asusta explicar lo que no tiene justificación, se mueven únicamente por los talleres cuando quieren contar chismes y meter miedo para preparar la justificación de su posterior firma. O para repartir calendarios y lotería, con eso está hecha su labor sindical.
2º.- Recusación del presidente y secretario del Comité: CGT pidió la destitución de estas dos personas ya que su gestión viene siendo nefasta durante todo su mandato. El secretario (UGT) cuando no pierde las actas, es que no ha tenido tiempo de redactarlas o se le olvidan. Sumar su actuación junto al presidente (CSIF) respecto a la demanda de los trabajadores de convocar una asamblea general previa a cualquier acuerdo con la empresa que se han saltado. Ante esta petición de recusación, sus secciones sindicales han salido a defenderles con uñas y dientes y claro se perpetuarán en sus cargos hasta el día del juicio final.
Aunque lo más vergonzoso, sangrante y vomitivo ha sido la actitud de varios miembros de la sección sindical de UGT-CCOO, los cuales no paraban de reír y hacer gracietas durante toda la reunión, algo que últimamente pasa con demasiada frecuencia. La seriedad brilla por su ausencia en el seno del Comité y estos personajes, elegidos por toda la plantilla para que les represente frente a la empresa, no son más que meros títeres que bailan al son que toca el flautista. En esta reunión echamos en falta chupetes y pañales para muchos de los presentes.
Esta imagen que dan es el reflejo de lo que percibimos en los talleres, donde muchos de sus afiliados en los fumaderos bufan contra ellos y contra su forma de actuar, pero son incapaces de darse de baja. Unos porque piensan que como son amiguetes de la empresa les van a putear, de echo amenazan impunemente a los que lo intentan, y otros por dejadez y pasotismo, prefieren pagarles la cuota y que les dejen en paz. Así nos va.
Era tan flexible, moldeable y obediente que no era una persona era un…………maniquí.
Un saludo libertario
Valladolid a 19 de abril de 2012