Bardean ariketa militar berriak: fuera militares de las Bardenas

Este viernes 28 de mayo, llamamos a participar una vez más en la concentración contra las maniobras militares con fuego real, que se están llevando a cabo esta semana en el entorno natural de Bardenas. Convocamos a las buenas gentes de Iruña y alrededores, y elevamos la convocatoria al Ministerio de Defensa para que esta vez la protesta no le pase desapercibida a Doña Margarita.
La lucha antimilitarista resulta en ocasiones tremenda y a veces desalentadora, sin embargo hay otras, en las que la lucidez y el desarrollo de los acontecimientos permiten ver, si una quiere, los vínculos directos que existen entre los conflictos, la barbarie a miles de kilómetros y la continua actividad militar de Bardenas. La realidad muchas veces supera la ficción, Palestina, Colombia, Siria, Ukrania, Yemen, Sudán… La OTAN ha decidido experimentar sus guerras aquí y eso es lo que parece que está sucediendo actualmente en Bardenas.
Estos días se está lanzando armamento real sobre el parque natural de Bardenas. Armamento que ya es habitual en este tipo de maniobras, que algunas quieren normalizar a base de hartazgo, silencio y ninguneo de quienes nos oponemos a él desde hace décadas.
Esta vez, en Bardenas se está probando “armamento inteligente”, curioso término para definir la muerte selectiva de quienes le sobran al capitalismo, y son sometidos a la barbarie que impone la OTAN en diferentes lugares del planeta. Las bombas GBU que se están lanzando en tierras bardeneras estos días, son vendidas en su mayor parte a Israel para llevar a cabo el genocidio contra el pueblo palestino.  Según el Ministerio de Defensa, la ventaja de este armamento reside en que puede batir blancos de día y de noche, en cualquier condición meteorológica, aumentando la distancia de lanzamiento y el aumento de la precisión, con la consiguiente reducción de fuego fratricida y bajas colaterales. Justo lo que está sucediendo en la franja de Gaza, donde la aviación israelí ha lanzado misiles inteligentes a campos de refugiados, edificios de prensa y hospitales.
También podríamos hablar de la violencia extrema que actualmente vive el pueblo de Colombia, tras la inclusión de Colombia en la OTAN, el desarme de las FARC y la “modernización de su ejército” pero no nos da la extensión de papel para tanta barbarie.
Y en medio de este escenario, aquí en nuestra tierra vivimos otra guerra también vinculada a la de los misiles. La guerra económica que condena a miles de personas a la miseria, a los ERTES, a los desahucios, a la falta de asistencia sanitaria, a la falta de cuidados… la emergencia ambiental y la creciente desigualdad. La alianza de la OTAN por sí sola representa el 56% de todo el gasto militar mundial. La misma alianza que compromete Bardenas para sus entrenamientos militares, la misma que le paga y sube el sueldo al actual presidente de la Junta de Bardenas. 54.000€ por realizar un trabajo sin cualificación técnica es mucha tomadura de pelo, viniendo de un peluquero. Tanta como considerar que los bombardeos ayudan a la nidificación de las especies protegidas, o considerar a la Comunidad de Bardenas un ente legítimo para decidir si este polígono debe seguir aquí o no. Un ente anticuado, que no asegura la participación de mujeres en su junta, pero sí que asegura la decisión de los representantes del Monasterio de la Oliva, sotanas de Satanás.