Decenas de organizaciones y colectivos han pedido libertad para todas las detenidas y encausadas por luchar en el Estado español: “En este Estado democrático la palabra de un policía vale más que la de un ciudadano por el simple hecho de ser policía”.
Gabinete de prensa del Comité Confederal de la CGT
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha participado hoy en la rueda de prensa y en el posterior acto celebrado en el Teatro del Barrio de Madrid, en el que se ha pedido la libertad de los jóvenes encarcelados de Altsasu.
El acto ha sido organizado por la Plataforma de Apoyo a Altsasu y ha contado con la presentación del actor y escritor Carlos Olalla, y la de Paco Cediel de Iniciativa Comunista.
La Plataforma de Apoyo a Altsasu ha denunciado la doble vara de medir que tienen los tribunales del Estado español, donde una pelea de bar sale mucho más caro que el asesinato de una mujer. “La Fiscalía pide 375 años de prisión para estos jóvenes que, independientemente de los que cumplan, tendrán sus vidas arruinadas”.
Paco Cediel ha querido dejar claro que el montaje policial y jurídico de Altsasu está alimentando determinados intereses políticos y se está usando para criminalizar expresiones y acciones, negar derechos y en definitiva encarcelar a la juventud rebelde y organizada. “Esto, por desgracia, ya no nos sorprende. Se trata de una estrategia del Estado para blindar a sus fuerzas del orden y para proteger su impunidad”.
Por su parte, Carlos Olalla ha hecho hincapié en que el caso de Altsasu no es un hecho aislado y lo ocurrido con estos jóvenes debe ubicarse en un contexto concreto. “Han pasado 6 años desde que ETA anunciara el final de su lucha armada. La sociedad vasca está luchando por la reconciliación y por establecer un relato que contenga todas las verdades. Pero por parte del Estado español se está haciendo todo lo contrario: políticas de dispersión de presos, imposición de un relato único que niega la existencia del conflicto y que establece víctimas de primera y de segunda”.
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha mostrado todo su apoyo a los encausados de Altsasu, incidiendo en la desproporcionalidad de las penas a las que se enfrentan estas personas.