Navarra a 14 de enero de 2016
Desde la Plataforma Navarra de Salud queremos felicitar al cuatripartito que sustenta el actual Gobierno de Navarra por el acuerdo presupuestario que, vía enmienda, plantea el cese del convenio por el que la Clínica Universitaria atiende sanitariamente a la plantilla y familiares del holding del OPUS en Navarra. Convenio que suponía la dejación de sus obligaciones sanitarias por parte del SNS-O y cesión a los intereses económicos del Opus.
Nos alegramos, porque la decisión de derogación del convenio favorece un sistema sanitario
público, único y equitativo y por ello defendemos la desaparición de los regímenes especiales en la atención a la salud como son MUFACE, MUJEJU, Montepíos etc., con similitudes con el convenio en derogación, que en realidad sirven para financiar con el dinero público a una sanidad privada gravosa y dependiente de lo público. Estamos de enhorabuena porque los recursos económicos hasta hoy entregados a la sanidad privada, y no olvidemos que generados vía impuestos y cotizaciones sociales, servirán para capitalizar y dotar de recursos humanos y de equipamiento al sistema público de salud.
En gran medida, la decisión a tomar por el Parlamento y Gobierno de Navarra nos complace
también porque termina con una atención sanitaria que discrimina negativamente a las/os
empleados de los centros del OPUS y familiares respecto al resto de la población. Se les ha negado una atención primaria integral: recordemos que les atienden en un hospital y no en un centro de salud; disponen según nos informan de dos médicos de familia para 7500 personas cuando la OMS recomienda uno cada 1500 personas, a lo que hay que añadir que no parece que dispongan de consulta autónoma alguna de enfermería. Así mismo, al ser entidad colaboradora de la Seguridad Social la misma empresa decidía si una baja era contingencia profesional o común. Sabidas las fobias sindicales del OPUS no es difícil conocer su tendencia al respecto. No hablaremos de la educación para la salud sexual y reproductiva o los derechos a la planificación familiar que se puedan hacer en la CUN.
Por último decir que en nuestra opinión los cálculos económicos realizados por la CUN sobre el convenio ocultan una total falta de rigor, ahora bien, si las cuentas que el portavoz de la CUN ha hecho públicas sobre lo gravoso del convenio para sus arcas, estamos convencidos de que celebrarán con esta Plataforma el fin del infierno financiero que les ha supuesto el mantenimiento del convenio durante estos años. Lo dicho todas y todos contentos.
Plataforma Navarra de Salud /Nafarroako Osasun Plataforma