Convocada por las organizaciones sociales y encabezada por secretarios generales de Euskadi de los sindicatos: ELA, LAB, ESK, STEE-EILAS, CGT, EHNE, HIRU, CNT, la Gran Vía Bilbaína se abarrotó de miles de personas que clamaron contra los recortes sociales, contra la reforma laboral y por la huelga general.
Lo más notable de la manifestación fue el formato unitario y plural de la misma, donde se mezclaron organizaciones de personas paradas, personal de empresas con EREs y despidos, ecologistas, nacionalistas, libertarios, comunistas, cristianos, organizaciones de mujeres, jubilados, jóvenes, organizaciones, inmigrantes, asociaciones gitanas, del M15M, etc.
Juntos y revueltos, sin bloques, con banderas y sin banderas, con un formato atractivo, que representaba a la mayor parte de las sensibilidades del pueblo contra quien más directa y duramente se está haciendo recaer el peso de la crisis y que esta vez ha reclamado masiva y unitariamente justicia social.